Retablo de Guimerà

 

 

Retablo gótico del maestro Ramon de Mur.
Guimerà. Lérida.
Obra original conservada en el Museu Episcopal de Vic.
Dimensiones: 730 x 524 cm.

La iglesia parroquial de Santa Maria de Guimerà, construida en el siglo XI sobre una gran roca en el centro de la población, y declarada conjunto histórico-artístico en el año 1975, albergó en su interior una de las piezas maestras y de mayores dimensiones de la época: el Retablo de Guimerà.

La obra   -conservada desde 1891 en el Museu Episcopal de Vic- es una pintura al temple sobre madera de nogal. Se encuadra dentro de la pintura gótica de estilo internacional; formas elegantes, desaparición del color dorado del fondo, y uso abundante de colores.
La gestión de todo lo necesario para la reproducción del retablo, ha sido posible grácias a la ilusión de la asociación guimera.info y, especialmente, a la obstinación de su presidente, Pascual Proust.


Es la primera reproducción exacta, de una obra de arte de estas características, que se  realiza en el mundo. Presentado junto a la compañía Hewlett Packard, fué elegido como el proyecto más destacado del espacio ”Calidad de Impresión”, de la  “25th International Conference on Digital Printing Technologies” 2009, Kentucky (EEUU), el evento más importante a nivel mundial en tecnologías de impresión digital.
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El retablo de Guimerà es una obra majestuosa creada por una imaginación encendida, libre de condiciones en cuanto a forma o estilo. Desafortunadamente solo se conservan 23 de las 32 tablas que componían el conjunto.

Como otras obras de semejantes características realizadas en el pasado, el retablo presenta una abrupta orografía debido sobre todo, al trabajo de talla que adorna el conjunto: columnas, cornisas y otros relieves. Pero también forman parte de su impronta actual, la pérdida de material pictórico que muestra la madera desnuda, el combamiento y separación de las tablas, el craquelado de la pintura conservada, etc.

La reproducción del retablo de Guimerà exigía una intervención especial y para ello era preciso el concurso de diversas disciplinas y la aplicación de los nuevos recursos existentes en tecnología digital que nos permitieran realizar una réplica exacta, evitando en lo posible, introducir inexactitudes que inevitablemente hubiera producido el trabajo manual.

Fragmento de la reproducción. Detalle del relieve de la superficie.

Escaneado tridimensional
El digitalizado del volumen del retablo fue realizado por la empresa Nub3d con su sistema TripleArt y utilizando su exclusiva tecnología MML Este proceso – llamado de luz blanca estructurada- permite capturar la tridimensionalidad de los objetos sin necesidad de contacto físico, el uso de referencias exteriores o el empleo de sistemas mecánicos auxiliares. Además, el sistema cumple con las exigencias museísticas de control de la intensidad de luz.

Mecanizado del volumen
La información del volumen (nube de puntos) es procesada y transformada a lenguaje de máquina herramienta (STL).
Una fresadora CNC de tres ejes, realizó un detallado trabajo (36 horas aproximadamente cada tabla) en MDF (Medium-density fiberboard). Este material presenta mejor estabilidad y homogeneidad que la madera y no es atacado por la carcoma.
Todos los elementos presentes en el retablo -molduras, grietas, pérdidas de la capa pictórica, etc- fueron recreados con gran precisión en un modelo sólido semejante al que presenta el original.

Fotografía digital en alta resolución
Se realizó un detallado reportage fotográfico tanto de las pinturas, como de los elementos más significativos de la obra.
Las imágenes -una vez escaladas y montadas- fueron corregidas cromáticamente. Para ello y como referencia, se pintaron con acuarela diversos parches de color, que fueron ajustados comparándolos directamente con la pintura.

Las imágenes se imprimieron sobre Papelgel, con tintas pigmentadas HP (con una duración en interiores de más de 100 años).

Transferencia de las imágenes
Las imágenes se aplicaron sobre las tablas, adaptándolas a las formas con volumen -columnas, molduras y otros saltos en el relieve- y textura -craquelado de la pintura, aguas de la madera, etc-.
La imagen transferida de las zonas donde se apreciaba la madera desnuda, mostraban una apariencia absolutamente convincente.

Se retiró Papelgel.

Se aplicaron dorados.

Finalmente se protegió el conjunto con barniz.


Michele preparando las tablas para su entrega


detalle de una de las tablas


retablo instalado en la iglesia de Guimerà


Momento de la entrega del retablo a la iglesia de Guimerà